Recomendaciones

1._ Se debe asegurar un montaje del cerramiento en obra no agresivo con la superficie lacada, es decir, se evitarán rayaduras que erosionen la capa lacada.

2._ No se deben montar piezas que no estén adecuadamente selladas después de cortar, serrar, taladrar o efectuar otra operación mecánica. Especial cuidado en el sellado de ingletes, juntas de unión y ensamblaje de perfiles.

3._ Respecto a las herramientas de corte no se utilizará el mismo disco que se haya empleado para cortar otros metales ya que entre los dientes siempre quedan restos de ellos (hierro, acero, etc) que dañan el lacado.

4._ No someter las piezas a calor, por fricción o corte, por encima de 70ºC.

5._ No exponer las piezas al ataque de productos químicos, ya sean vapores o líquidos, o a gases industriales agresivos, pues pueden dañar el lacado.

6._ Asegurarse de la no agresividad de las masillas usadas para la colocación de cristales.

7._ Evitar la creación de pilas galvánicas por el uso al mismo tiempo de materiales de anclaje diferentes al aluminio, como pueden ser remaches, escuadras, premarco, soportes, etc., de materiales diversos. Los elementos accesorios (tornillería, herrajes, etc.) necesarios para el montaje de la puerta o ventana serán de aluminio. Si se utilizan herrajes cincados, para evitar que el par de apriete aplicado puede destruir la capa de cinc y poner en contacto hierro y aluminio, se utilizarán tacos y protectores de plástico.

8._ Ensamblar con fundas plásticas o tacos, los elementos de sujeción cuando éstos sean de acero. Que dichos elementos estén zincados convenientemente. Ver el punto 7.

9._ Evitar el contacto de morteros de cemento con el aluminio. Emplear yeso en el enlucido de la junta de un marco con la obra.

10._ El mejor ajuste es sobre premarco de madera o aluminio.

11._ La protección o sellado deberá ser muy rigurosa cuando los edificios estén cerca del mar, ya que el ambiente salino y, en algunos casos, la acción directa del agua de mar puede acelerar algún determinado tipo de corrosión.

12._ Los cerramientos de aluminio deberán ser limpiados periódicamente. La frecuencia estará en función de la atmósfera en la que se encuentre la construcción aunque, en cualquier caso, se debería hacer por lo menos una vez al año.

13._ La limpieza se debe hacer utilizando una disolución al 5%, en agua clara, de un detergente o jabón neutro y empleando una esponja, trapo de cuero o paño húmedo evitando la presencia de cualquier elemento que pueda rayar el acabado (arena en el agua, polvo, etc). Se aclarará con abundante agua limpia.

14._ No usar productos de limpieza agresivos. No utilizar materiales abrasivos, disolventes orgánicos o detergentes de los que se desconozca su composición química.